Carles Rúa es responsable de proyectos estratégicos e innovación del Port de Barcelona y codirector del máster Executive en Supply Chain Management. Operaciones y Logística de la UPC School. En esta entrevista nos explica los retos actuales del sector de la logística, uno de los motores clave de nuestra economía. Sostenibilidad, digitalización y nuevos sistemas de transporte disruptivos, algunas de las claves para el nuevo escenario.
- ¿Qué peso ocupa el sector logístico en nuestra economía en términos de negocio y ocupación?
La logística es uno de los pilares básicos de la economía de nuestro entorno. Cualquier infraestructura logística tiene un impacto muy relevante en el territorio, tanto en términos de generación de riqueza como en términos de empleabilidad. Si tomamos, por ejemplo el puerto de Barcelona, el entorno que mejor conozco, que representa sólo una parte de la logística de nuestro entorno, las cifras son para reflexionar: estamos hablando de más de 41.000 puestos de trabajo directos y de un cuarto de millón de puestos de trabajo entre directos, indirectos e inducidos, hablamos de un comercio internacional que transcurre por él de 55.400 millones de euros, de más de 11.500 millones de euros de valor añadido bruto total, del 7,1 % del valor añadido bruto de Cataluña, etc. Y el puerto es sólo una porción de la logística…
- La logística ha vivido una profunda transformación en los últimos años marcada por la digitalización y la globalización. ¿Cuáles son los cambios más significativos que se derivarán?
La automatización (vehículos autónomos, drones…) y la robotización (terminales automáticas, almacenes robotizados…) junto con un mejor uso de la información (big data, IoT, data sharing…) son los aspectos más relevantes en el ámbito de la digitalización.
En cuanto a la globalización creo que no somos realmente conscientes del reto que representa para nuestra economía una Europa en declive (poblacionalmente y a nivel productivo), frente a unos “nuevos” continentes en expansión a nivel demográfico, de producción y consumo, con el sudeste asiático y África a la cabeza.
Pero aparte de la globalización y la digitalización, hay otros dos factores muy relevantes a tener en cuenta. El primero, la transición energética, que afectará enormemente al sector del transporte. El desarrollo de nuevos combustibles más limpios (LNG, CNG y biocombustibles como transición y posiblemente H2 a largo plazo) y la electrificación producirán una revolución en los próximos años. El segundo, los cambios en los hábitos de compra, como el e-commerce, que van a generar importantes tensiones en las cadenas logísticas en especial en lo que respecta a la última milla.
- ¿Qué oportunidades plantea este nuevo escenario para los profesionales del sector?
La logística, en su concepción más amplia, es un sector en franca expansión en nuestro entorno. Un estudio de la Fundació BCN Formació Professional destaca que el 55,3% de las empresas del sector ampliarán su plantilla de profesionales con estudios universitarios en el corto plazo, lo cual pone de manifiesto las necesidades de ocupación del sector y especialmente de profesionales bien formados. El mismo estudio también muestra las carencias formativas del sector. En este sentido, la necesidad de formación complementaria, como pueden ser cursos de máster y posgrado es evidente.
- ¿Qué competencias van a necesitar estos profesionales?
Se buscan profesionales polivalentes, capaces de gestionar equipos, orientados al cliente y a la resolución de problemas, con buenas capacidades de relación y negociación. A nivel técnico hay que tener en cuenta los cambios que se avecina. Por ello, es necesario también estar formado en las nuevas tecnologías logísticas. Y el inglés. Probablemente el principal punto débil de nuestra formación. Un nivel inferior al C1 no es aceptable en el sector.
- En octubre pondréis en marcha la 19ª edición del máster en Executive en Supply Chain Management. Operaciones y Logística. Es una formación muy consolidada, pero, ¿de qué forma habéis ido adaptando los contenidos formativos a las necesidades actuales?
Por un lado, tenemos un Consejo Asesor formado por importantes empresas del sector, que nos ayudan año tras año a definir los contenidos y a proponer cambios en el temario basándose en sus necesidades más recientes. Por otro lado, el propio contacto con los profesores, profesionales con larga experiencia en sus campos, nos ayuda a matizar dichos contenidos y adaptarlos a las necesidades del mercado. No olvidemos que el objetivo de un máster no es proporcionar conocimientos al alumno, que también, sino hacer que ese alumno domine los conocimientos que requiere su empresa o su sector y hacerlo más competitivo. Es por ello que saber las necesidades del mercado, de las empresas, es básico para confeccionar un programa académico.
- En el mercado existen muchas opciones formativas en el campo de la logística. ¿Qué valor diferencial aporta este máster de la UPC?
Es un máster de profesionales para profesionales. El 100% de los profesores pertenecen al sector logístico, no al sector universitario. Esto da un carácter específico al máster, ya que las clases no se plantean como sesiones magistrales sino como espacios de diálogo entre el profesor y el alumno, potenciando la experiencia práctica de ambos. Nosotros somos de la opinión que en el entorno actual los conocimientos teóricos, aunque necesarios, se han convertido en una commodity: cuando quieres saber algo, lo preguntas en Google o lo buscas por internet. El aprendizaje hoy en día se basa en compartir experiencias, y estas sólo las pueden proporcionar los profesionales, con aportaciones reales basadas en sus éxitos y fracasos.
Otro factor diferenciador es el proyecto final de máster. En este caso se trata de un proyecto real, realizado en una empresa real y tutorizado por un alto directivo de la empresa. Otra vez intentamos potenciar el networking y la aplicación práctica sobre el contenido teórico.
- ¿Para quién está pensada esta formación y qué le aportará?
A nivel de posicionamiento tratamos de dar una visión global y estratégica de las cadenas de suministro. Por ello el máster está indicado para aquellos profesionales que aspiran en el futuro a desarrollar funciones directivas en áreas como producción, distribución, compras, logística, transporte, etc.
Hay que tener en cuenta también que el máster está pensado para personas con un mínimo de experiencia laboral: es difícil establecer el diálogo al que antes aludíamos sin un conocimiento mínimo del entorno laboral.