Josep Muntañola, catedrático y doctor en Arquitectura por la UPC, y Ana Cocho, doctora en Tecnología de la Arquitectura y experta en nuevas metodologías computacionales de diseño arquitectónico, dirigen el nuevo máster en Artificial Intelligence for Architectural Design que la UPC School pondrá en marcha el próximo mes de octubre. En esta entrevista nos acercan a los retos tecnológicos del sector arquitectónico y nos contextualizan la necesidad de formar a los futuros especialistas en esta área.
- La arquitectura, como tantos otros sectores, parece que no restará ajena al impacto decisivo de la tecnología. ¿Hasta qué punto la computación impactará en el diseño arquitectónico?
La tecnología afectará de lleno al proceso de diseño arquitectónico hibridándolo con ella y haciendo que el arquitecto haya de trabajar en un equipo multidisciplinar. El concepto de arquitecto tal y como lo conocíamos hasta ahora quedará en entredicho. Los efectos de la tecnología en la arquitectura están por explorar y traerán consigo enormes oportunidades.
- En este sentido, ¿qué competencias van a necesitar los profesionales de la arquitectura para liderar este escenario no tan lejano?
Hemos de pensar que no se trata de que todos los arquitectos y diseñadores se vuelvan ingenieros computacionales. Lo necesario es que tengan el conocimiento general suficiente de estos nuevos procesos tecnológicos para que entiendan cómo pueden beneficiarse de ello para su proceso de proyectación. La implementación la ha de llevar a cabo un ingeniero computacional experto que el arquitecto ha de saber direccionar hacia los intereses del proyecto en particular.
- Una de las tecnologías emergentes más potentes y con mayor impacto es la inteligencia artificial. ¿Qué ventajas aportará su aplicación en la práctica arquitectónica?
La simulación inteligente del espacio humano sirve para comprobar las condiciones humanas de este espacio y las diferencias respecto a un lugar humano real. Esa sería su principal contribución, pero las ventajas son múltiples, desde simulaciones de comportamiento de los usuarios en proyectos aún no construidos para comprobar la eficacia de su diseño, a edificios de adaptabilidad dinámica al clima o la variación de usos en su interior. También ayudará al análisis durante la vida funcional del edificio para mejorar su funcionamiento, la variabilidad y adaptabilidad energética o la ligazón estética y formal a su performance, entre otros.
- En un sentido más práctico, ¿cómo va a influir en el trabajo de los arquitectos?
Todo lo computacionalmente diseñado se basa en una variabilidad y continuidad, así pues, es probable que lo digital genere no solo una nueva estética, sino que probablemente habrá un cambio de paradigma en la arquitectura y se redefinirán sus bases con las nuevas posibilidades que la hibridación con la inteligencia artificial abre. La tecnología aumenta la posibilidad de imaginar formas nuevas, estructuras e infraestructuras con prestaciones funcionales nuevas, pero, como en todo, culturas y artes automáticos no dan para mucho sin cerebros que las analicen en profundidad.
- ¿Cómo valoráis el grado de madurez de la IA en el sector arquitectónico actual? En este sentido, ¿podéis enumerarnos ya algún ejemplo de proyecto en el que se esté utilizando esta tecnología?
Más allá de ciertos librepensadores y filósofos, la praxis de la IA en la arquitectura aún no está muy desarrollada. Tenemos que pensar que, a pesar de que algunos pocos llevan ya tiempo hablando del tema, como mucho es desde hace unos 5-10 años que el debate ha saltado al círculo general del debate de la disciplina arquitectónica. Hasta entonces solo un contado grupo de dos o tres escuelas de arquitectura afrontaban el tema. Ha surgido toda una cultura de creación de pequeños pabellones en los que se prueban, a pequeña escala diferentes técnicas. A escala real, únicamente se ha probado en algunas fachadas, como la de AEDAS Tower en Abu Dhabi.
- El mes de octubre, pondréis en marcha la 1ª edición del máster Artificial Intelligence for Architectural Design, en modalidad semipresencial y 100% en inglés. ¿Qué objetivos perseguís con esta apuesta formativa?
El objetivo fundamental, además de un conocimiento general de las técnicas IA y lo que con ellas en el diseño arquitectónico podemos conseguir, es inculcar la idea de que los arquitectos hemos de hablar de IA. Es verdaderamente inevitable que algo que está afectando a todas las capas del humano y su sociedad afecte al modo de desarrollar su entorno construido. Los arquitectos llegan tarde al debate acerca de cómo la IA y la arquitectura caminarán juntas. Buscamos reeducar el cerebro del diseñador y enseñarle a utilizar el potencial de la tecnología al servicio del lugar arquitectónico y urbanístico diseñado, construido y usado, de forma que aumente así el control estético, científico y ético-político del diseñador sobre su trabajo, en paralelo a lo que la sociedad se propone hacer a nivel mundial y local.
- ¿Para qué tipo de perfil está pensado este máster?
Está pensado para cualquier diseñador: desde el que diseña letras alfabéticas al que diseña ciudades, sobre todo porque su convivencia en el máster será su mejor escuela.
- El componente aplicado es una de las características en las que se hace más hincapié. ¿Qué tipo de proyectos realizarán los alumnos y con qué softwares?
Cada alumno desarrollará la suficiente capacidad crítica para decidir, según sus objetivos y con su tutor, el camino tecnológico a seguir. Puede ser programación visual con Grasshoper, escribir código con Python, analizar datos del proyecto con Mathlab, Space Syntax o programación de agentes, entre otros.
- ¿Cuáles son las salidas profesionales de este máster?
El perfil será el de un arquitecto formado en nuevas tecnologías capaz de trabajar en grupos multidisciplinares y con conocimiento en IA suficiente como para tomar decisiones acerca de su implementación. De hecho, es necesario que cualquier empresa o institución que imagina formas, productos y procesos quiera mejorarlos, dentro de lo que hoy se denomina como cuadro creativo de una empresa o institución, en lo que se refiere a su concepción, fabricación, uso o lectura, y tanto en la vertiente industrial como artística.